Es ella. The Loglady ha aparecido en la sala de lectura con sus grandes monturas en unas gafas que parecen no tener cristal y, en lugar de un tronco, lleva una maleta llena de libros.
Coincidir con ella es normal, además de peculiar. Desde hace tres años ronda los alrededores de la universidad -bibliotecas y salas de estudio- cargada con su maleta de sabiduría. Llega, echa un vistazo -todo está en orden, mis niños- y se va sin que las ruedas de la maleta hagan el menor ruido.
Es ahora cuando caigo en la cuenta de que, posiblemente, está a la espera de que alguien le pare y le pregunte:
- Mrs. Loglady, ¿quién de nosotros cometió el asesinato?
Coincidir con ella es normal, además de peculiar. Desde hace tres años ronda los alrededores de la universidad -bibliotecas y salas de estudio- cargada con su maleta de sabiduría. Llega, echa un vistazo -todo está en orden, mis niños- y se va sin que las ruedas de la maleta hagan el menor ruido.
Es ahora cuando caigo en la cuenta de que, posiblemente, está a la espera de que alguien le pare y le pregunte:
- Mrs. Loglady, ¿quién de nosotros cometió el asesinato?
3 comentarios:
sueter rosa y medias negras de punto!
Gafotas todos!
;-)
q miedico....
Exacto, ¡existe! Pero no da miedo, es adorable ;)
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