4.11.08

Frutos de la ya histórica movilización estudiantil en Valencia

Después de una, dos e incluso tres semanas de encierros en las facultades de Blasco ibáñez y Tarongers, las protestas contra el proceso de Bolonia llegaron a un punto álgido el pasado miércoles con el encierro en el rectorado de la Universitat de València. Tras esta medida de presión, el rector Francisco Tomàs i Vert se comprometió a participar en un DEBATE PÚBLICO el miércoles 5 de noviembre a las 11:00 h. en el Aula Magna de la facultad de filosofía y ciencias de la educación de la UV.

Este es un paso muy importante en la lucha que estamos llevando a cabo desde la universidad. De hecho, es la primera vez que el rector se somete a un interrogatorio público. Pero no hay que olvidar que la reforma universitaria que se pretende implantar no sólo afecta a los estudiantes universitarios, sino a toda la sociedad. La formación de futuros investigadores, profesores y profesionales según criterios mercantilistas que fomentan la competitividad y lapidan la teoría en pro de una práctica alienante al sistema, es algo que nos atañe a todos.

Desde las distintas asambleas de estudiantes, invitamos -rogamos- a todo aquel que pueda, su asistencia al debate. Se exigirá a Tomàs i Vert que se posicione respecto al Plan Bolonia, tal y como ocurrió en el debate con el rector de la Universidad Complutense de Madrid el pasado mes de mayo. Carlos Berzosa, el rector de dicha universidad, respondió a la petición mediante un artículo publicado en El País, del que extraigo unas partes que vienen al caso:

"(...) debemos ser los universitarios quienes elaboremos los planes de estudio y el catálogo de títulos que proponemos para nuestras universidades, así como decidir los métodos docentes a aplicar. Si las cosas se hacen mal, será nuestra propia responsabilidad, no la de otros".

"Los rectores, en este contexto tan complejo, no deberíamos convertirnos en meros seguidores de los dictados emanados desde la ANECA, y tenemos que posicionarnos ante nuestros estudiantes".

Así pues, animemos todos al señor Tomàs i Vert a que se posicione el próximo miércoles de la misma manera que lo hizo su homólogo Carlos Berzosa. Juntos podremos paralizar la implantación del Plan Bolonia y lograr un debate abierto sobre las pautas a seguir en una reforma que realmente intente paliar las deficiencias del actual sistema universitario. Juntos, podemos.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

No lo veo claro...si uno va a la Universidad a estudiar, es porque no tiene los conocimientos necesarios para la titulación, y si es así, ¿cómo puede decidir qué es lo que tiene que estudiar?

Irrelevante dijo...

http://www.aefv.org/drupal/docsoficiales

Mayka dijo...

Querid@ invitad@ de la tienda de los tés:

A la universidad asisten personas de todas las edades, formaciones y pareceres. Como cualquier colectivo, los estudiantes tenemos criterio y capacidad para opinar. No creo que esta capacidad venga con un título de licenciad@. Por otra parte, la idea de participar en el debate sobre los contenidos de las titulaciones no es tanto para elegir cada materia como para impedir que eliminen todo un curso (como en el caso de historia del país valenciano en el grado de historia) o junten en un grado (4 años) llamado "Lenguas modernas y sus literaturas" las filologías inglesa, alemana, francesa e italiana. Creo que la reducción de 140 carreras a 72 grados necesita de la discusión, ya no de la comunidad universitaria, sino de toda la sociedad.

Y hablo de discución y capacidad crítica, más que nada, porque no se ha declarado oficialmente qué criterios se siguen para, por una parte, respetar los 5 años de la Licenciatura de Arquitectura y, por otra, reducir todas las demás a los 4 años del grado e incluso eliminar algunas, como el caso de Filología Catalana.

Pero bueno, los criterios se intuyen, sólo hay que ver el papel protagonista que ha tenido la construcción en el mercado especulador que ha enriquecido a las empresas. Supongo que un arquitecto les viene mejor que un filólogo. Y las empresas, con esta reforma, podrán decidir qué másteres financiar y cuáles dejar que mueran ante la pasividad del estado, que al parecer prefiere reflotar los bancos antes de aumentar el presupuesto destinado a educación.

Anónimo dijo...

Me ha encantado el link de "criterios mercantilistas". He leído unas cuantas frases muy buenas en ese documento. Qué majos los del círculo de empresarios (no me apetece ni ponerles mayúscula, ala!)

ñañaña!!

Yago Galleta dijo...

La que está montando Bolonia, a ver si lograis algo